Abastos & Viandas

Mercado gourmet en Marbella

El interiorismo para Abastos y Viandas, un nuevo mercado gourmet de Marbella, surge a través de un concurso convocado por la empresa grupo Alfil.

El enunciado del concurso contemplaba la renovación de la planta baja y sótano del edificio Alfil, situado en pleno centro de Marbella, con la intención de desarrollar “un espacio tradicional a la vez que moderno, artesanal a la vez que industrial y adaptado a las necesidades actuales”.

Nuestro objetivo principal era hacer un mercado que recogiera la esencia del lugar. Por eso, aunque partíamos de unos requisitos muy generales, buscamos la forma de conectarlos con el contexto urbano estudiando la situación de la parcela, así como el pasado industrial y la tradición artesanal de la ciudad.

El Mercado ha sido diseñado, en definitiva, buscando una experiencia de usuario 360º y teniendo en cuenta aspectos esenciales como la accesibilidad, la ubicación óptima de las zonas de consumo y venta, la funcionalidad y la eficiencia energética del espacio.

Año
2016
Premios
Finalista. Abastos & Viandas / Grupo Alfil
Ubicación
Marbella
Interiorismo
Pedro Pérez
Marina Gonzalez
Damián López

Un mercado que sólo haríamos aquí

El Edificio Alfil está situado en una zona de expansión del núcleo urbano de Marbella que se edificó durante el desarrollo urbanístico de los años 60. La parcela donde se sitúa el actual mercado fue en su origen una zona de uso agrícola. Esta esencia es la que se ha pretendido recuperar y plasmar en la identidad del espacio. El esplendor de las zonas rurales en la provincia de Málaga se produjo durante los s. XVIII – XIX, con el auge del sector vitivinícola.

Las construcciones tradicionales en estas zonas eran los lagares, haciendas, cortijos y casas de labranza; espacios que combinaban actividades industriales a pequeña escala con otras más artesanales.
Uno de los elementos esenciales en estas construcciones es el porche, por lo general situado en la cara sur del edificio. El porche era entendido como una extensión del espacio interior al exterior y solía estar cubierto prácticamente en su totalidad por vegetación. Esta barrera vegetal servía como protección climática para las altas temperaturas al generar una refrigeración evaporativa.

Estas características no sólo estaban presentes en zonas rurales sino también en los núcleos urbanos, como todavía puede observarse en el casco antiguo de Marbella. Acorde con esto, se ha interpretado el soportal de la C/ Alonso de Bazán, con orientación sur, como el porche de una de estas construcciones tradicionales.

Un interiorismo inspirado en la historia de Marbella

A principios del siglo XIX, Marbella se convirtió en un referente nacional: se instalaron en el municipio los Altos Hornos de Marbella que llegaron a producir el 75% del hierro colado del país. La llegada de las siderúrgicas supuso la industrialización a pequeña escala de los lagares, que se equiparon con maquinaria mucho más moderna. La mayoría de las industrias que se establecieron en la provincia fueron de origen inglés, muy influenciada por el Modernismo Racional y la arquitectura de Mackintosh.

Este desarrollo supuso una nueva concepción del espacio y nuevas formas de trabajar los materiales. El hierro permitió curvar y retorcer las líneas, así como construir estructuras mucho más espaciosas y esbeltas; el vidrio permitía la unión del espacio interior y el exterior, multiplicando los efectos luminosos y la profundidad.

En base a estos principios y a la arquitectura modernista racional se han diseñado los cerramientos de vidrio y metal, incorporando la calle al espacio interior y reivindicando así el carácter de los mercados que en su origen eran concebidos como una plaza cubierta.
Además de potenciar la luminosidad, tan presente en la cultura andaluza.

Materiales autóctonos y de proximidad

Otra de las características de la cultura tradicional de la provincia es el uso de materiales autóctonos, muy presentes en la arquitectura y en los espacios interiores. Algunos de estos materiales, que se han convertido en un icono de nuestra cultura a día de hoy, han sido el punto de partida para el desarrollo de todo el mercado, reinterpretándolos de una forma más delicada y actual.

De este modo, se ha utilizado la textura de las casas pintadas de cal para las paredes que dividen los puestos. Las fibras naturales, muy comunes en la fabricación artesanal de muebles, cestos y otros útiles, se han usado en algunos elementos decorativos y también en parte del mobiliario, diseñado en exclusiva para este Mercado. La celosía, herencia de la cultura andalusí, ha sido una pieza clave en la materialización del espacio por su riqueza visual y el juego de luces y sombras que produce. Otro elemento característico ha sido la cerámica, que representa uno de los materiales más usados en la elaboración de objetos y elementos de construcción en Andalucía.

Otro uso muy frecuente de la cerámica es el decorativo, presente a través de platos, tiestos y otros elementos pintados y vidriados en los patios andaluces. Una reinterpretación de esta cerámica, que une los conceptos de modernidad y tradición, son los platos QR ceramics, diseñados por Granada Barrero, y que reproducen un mensaje al ser escaneado con el teléfono móvil.

Proyecto de interiorismo. render 3D. Tabiques móviles

Una planta baja flexible y polivalente

La planta del sótano se concibe como un espacio más contemporáneo y multifuncional. Elemento como los paneles móviles permiten la realización de diferentes actividades en un espacio que puede transformarse según las necesidades de cada evento.

Exceptuando la sala de catas y la de reuniones, el resto del espacio puede dividirse en tres estancias independientes, en dos de mayor tamaño, o en una completamente diáfana.